Agua para todos, agua para la vida.

La Tierra, con sus diversas y abundantes formas de vida, se enfrenta, en este comienzo del siglo XXI con una grave crisis del agua. Todas las señales parecen mostrar que la crisis esta empeorando y continuará haciéndolo a no ser que se emprenda una acción correctora. Se trata de una crisis de gestión de los recursos hídricos esencialmente causada por la utilización de métodos inadecuados.

            Resolver la problemática del agua es, sin embargo, uno de los muchos desafíos a los que la humanidad se enfrenta en este tercer milenio y ha de considerarse en este contexto. La crisis del agua debe situarse en una perspectiva más amplia de solución de problemas y de resolución de conflictos, así lo ha entendido la ONU con la elaboración de estrategias como la que reseñamos.

            El informe da las Naciones Unidas sobre el Desarrollo de los Recursos Hidricos en el Mundo ha sido producido por 23 agencias y organismos de la ONU que, por primera vez, combinan sus esfuerzos y conocimientos para elaborar una visión global de la situación del agua en nuestro planeta. Este informe constituye un hito en la lucha que la comunidad internacional tiene que mantener contra el más grave problema social, ambiental y político al que se enfrenta el planeta: la crisis mundial del agua.

            Once desafíos son los que estructuran el informe. En un primer bloque estarían los desafíos frente a la vida y al bienestar, que son:

1.- Satisfacer las necesidades humanas básicas.

2.- Proteger los ecosistemas en bien de la población y del planeta.

3.- Ciudades: necesidades divergentes del entorno urbano.

4.- Asegurar el suministro de alimentos para una población mundial creciente.

5.- Promover una industria más limpia en beneficio de todos

8.- Utilizar la energía para cubrir las necesidades del desarrollo.

 

            Un segundo bloque estaría constituido por los desafíos en el ámbito de la gestión o gobernabilidad:

7.- Reducir los riesgos y hacer frente a fa incertidumbre.

8.- Compartir el agua: definir el sistema común.

9.- Identificar y valorar las múltiples facetas del agua.

10.-Asegurar la difusión de los conocimientos básicos: una responsabilidad colectiva.

11.-Administrar el agua de modo responsable para asegurar un desarrollo sostenible.

            Lamentablemente, al avance para superar los problemas del agua por el momento ha sido escaso. Es cierto, y así lo observamos desde la Unión de Consumidores, que se han tomado diversas medidas, pero ni aun siendo indulgentes podemos decir que hayan producido los resultados esperados. Quizás se alcancen en los arios venideros.  Así lo deseamos desde la Unión de Consumidores de Andalucía.