Miércoles, 18 de agosto de 2010. La Unión de Consumidores de Andalucía ha recomendado a los estudiantes universitarios que no pospongan la búsqueda de su vivienda para el próximo curso. En rueda de prensa, su responsable de comunicación, María Coronada Vázquez, ha advertido que ya sea por el calor o porque muchos vuelven para los exámenes de septiembre “hay quien espera hasta entonces para comenzar a indagar, de manera que tienen mucho menos tiempo para comparar precios y calidades”.
Vázquez ha explicado que durante los meses de octubre y noviembre comienzan a aumentar las consultas relativas a problemas surgidos en cuanto al alquiler de los inmuebles o los contenidos de los contratos. Las principales causas por las que se reclama están directamente relacionadas con el incumplimiento de las condiciones pactadas, la existencia de cláusulas abusivas, la falta de muebles y enseres y los problemas con los electrodomésticos.
Por ello, la Unión de Consumidores de Andalucía ha ofrecido una serie de consejos para evitar estos abusos y los problemas que se puedan derivar de los mismos. En primer lugar, la federación de consumidores recomienda no esperar al último momento para buscar la vivienda y comenzar ya mismo. Lo más adecuado es incluso comenzar a mediados de verano ya que, tal y como ha indicado la responsable de comunicación de la Unión de Consumidores, “si esperamos a septiembre no podremos comparar precios ni calidades y, además, puede que en los últimos días los precios de los alquileres se incrementen”. En el caso de que el piso se alquile mediante una agencia inmobiliaria o Internet, es preferible visitar antes el apartamento para evitar sorpresas en cuanto a sus características.
En segundo lugar, hay que exigir un contrato por escrito y evitar los acuerdos verbales donde no queda constancia. Estos pactos verbales, aunque se consideran legales, no son aconsejables, ya que, ante la falta de documento escrito, es muy difícil solucionar las discrepancias que pudieran surgir. En dicho contrato –o en un anexo del mismo– deben incluirse todos los enseres y electrodomésticos con los que cuente el inmueble y, claro está, comprobar que están en perfecto estado y funcionan correctamente.
Cuando se realice el pago del arrendamiento, de la fianza o de cualquier cantidad entregada a cuenta, el inquilino tiene el derecho a un recibo que así lo acredite. Por eso es también recomendable hacer los pagos de la renta –o de cualquier suministro o servicio como la luz, el agua, Internet o la comunidad, por ejemplo– mediante una entidad bancaria y especificarlo en el concepto de la operación. Las facturas, recibos y contratos son documentos fundamentales y necesarios para interponer cualquier reclamación por lo que es fundamental conservarlos.
Por último, la responsable de comunicación ha solicitado a la Administración andaluza que intensifique los controles y las inspecciones en materia de vivienda, sobre todo, “a aquellas que no se declaran y cuyos pagos no se ajustan a la legalidad ya que los abusos suelen darse más frecuentemente en estos casos que, además, complican mucho la tramitación de reclamaciones”. Según la representante de los consumidores, en Internet existen muchos anuncios de viviendas que explicitan la imposibilidad de declararlas en el IRPF o de acceder a cualquiera de las ayudas que la Consejería de Vivienda de la Junta de Andalucía ofrece a los jóvenes “atentado directamente y sin ningún tipo de tapujos contra los derechos y los legítimos intereses de los consumidores andaluces”.
En caso de que existan dudas legales en cuanto al alquiler del piso, la Unión de Consumidores de Andalucía recomienda acudir a cualquiera de las oficinas que la federación tiene en las ocho provincias andaluzas.