La Unión de Consumidores de Andalucía comparecía en el Parlamento Andaluz el pasado 17 de noviembre exponiendo sus alegaciones al Proyecto de Ley de la Muerte Digna.
José Carlos Cutiño, responsable de Relaciones Institucionales de UCE-Andalucía, fue el encargado de comparecer y manifestar la decidida apuesta de la Unión de Consumidores por una normativa a todas luces “valiosa, necesaria y oportuna”, ya que viene a “precisar y completar el marco normativo vigente aplicable desarrollando así el vigente Estatuto de Autonomía”, a la vez que pone de manifiesto el grado de madurez de la sociedad andaluza para resolver un dilema pendiente con diversas interpretaciones éticas y morales desde el respeto a dignidad de la persona hasta el mismo momento de la conclusión de su vida.
Según UCE-Andalucía, la citada Ley viene a dar respuesta y a aportar seguridad jurídica a situaciones que en la práctica se vienen produciendo por los avances tecnológicos en el ámbito de la medicina que en la actualidad inciden en el proceso de la muerte y que han generado conflictos muy recientes.
UCE-Andalucía está convencida de que la asistencia sanitaria no sólo debe regirse por un principio de “beneficencia” (buscar el bien del paciente), sino que debe respetar también el principio de “no maleficencia” (no causar un perjuicio mayor que el que se pretende evitar). Por eso, UCE-Andalucía valora que la norma se sustente sobre el principio de la autonomía de la voluntad del paciente libre y conscientemente expresada, por encima de otras consideraciones, y establezca los derechos de los usuarios y los deberes de los profesionales.
Asimismo, UCE-Andalucía entiende que la Ley debe venir acompañada de la dotación de medios necesaria para hacer posible los derechos que se reconoce al paciente, tales como una habitación individual para la persona en fase terminal y su acompañante, algo que aún no está al alcance de todos los centros hospitalarios.